La imaginación al poder

Jóvenes en Bucaramanga, cultura y política. La lucha continúa del Mayo del 68 a la actualidad.

Los jóvenes no se interesan, no participan, o no tienen presencia en lo público; es una idea que continuamente se dice al hablar de su relación con la participación política.  En 1997, en su célebre discurso Jaime Garzón, dio una de las frases más recordadas y directas para la transformación del país como tarea:

“nadie va a venir a salvar el país. ¡Nadie! y son ustedes, los jóvenes los únicos actores del cambio”.
Jaime Garzón, 1997

Hoy estas palabras se convierten en el llamado a actuar. Las movilizaciones en contra de la Ley 30 de educación superior, la gran marcha por la paz cuando ganó el No en el plebiscito para refrendar los acuerdos de la Habana y los actos de protesta que surgen por defender líderes sociales, presupuesto educativo y el medio ambiente son una muestra del poder de los jóvenes para el cambio. 

Bucaramanga y su Área también han vivido muestras de participación juvenil, especialmente en la protección del páramo Santurbán frente a la explotación minera. Pero estos actos no son momentáneos, grupos juveniles han consolidado su presencia desde el arte, la cultura, las aulas de clase y las calles; formas de participación alternativa con las que logran transformaciones e incentivan a más jóvenes a descubrir otras formas de participar políticamente.

Por medio de videos, murales, canciones, teatro o literatura los jóvenes expresan sus opiniones y reflejan sus necesidades, tal es el caso del cortometraje ‘Amigos’ llevado a cabo por un joven bumangués de 19 años en el barrio Los Colorados, en el norte de Bucaramanga, el cual brinda un espacio de creación para los jóvenes de este barrio; también actividades como las pintadas sociales a cargo de colectivos como Muros con sentido, quienes junto con habitantes de El Pantano, barrio de la capital santandereana, crearon murales y embellecieron zonas abandonadas, evitando lugares grises que permitían la delincuencia, o talleres de formación como los que brinda el proyecto ‘Aguante la Barra’ dirigido por jóvenes pertenecientes al Centro Latinoamericano del Propósito,  para disminuir la violencia en las barras de Bucaramanga. Además, proyectos como ‘Fuerza, razón y cumbia’ desarrollado en Piedecuesta por el colectivo social La Panela, donde por medio de talleres musicales incitan a los niños  a tener espacios de sano esparcimiento y aprendizaje. El trabajo y las ideas de personas como Brayan Sarmiento, David Guerrero, Jorge Moreno, encuentran salida y dan cuenta de que en el área metropolitana los jóvenes están trabajando. 

Estos colectivos sociales o grupos artísticos están creando espacios para hacer política y transformar la realidad. Daniel Corzo, Director de proyectos del Centro Latinoamericano del Propósito, menciona sobre esta forma de hacer política “hemos sido invisibilizados, pero nuestra presencia está en aumento; votando, como candidatos, desde espacios de veeduría, grupos juveniles y movimientos estudiantiles, los jóvenes sí estamos presentes”. 

Según el Censo poblacional en 2018, más de 12 millones de residentes en Colombia están entre 15 y 29 años. Iván Prada, líder estudiantil de la UIS, “somos gran parte de la población y no podemos quedarnos con los brazos cruzados, para cambiar la situación del país, es el momento de actuar es ahora”. 

¿Qué pasaría si todos los jóvenes votan?

En los medios de información y en las redes sociales se escucha de manera recurrente frases como “si todos los jóvenes votarán pondrían un presidente” los que tienen menos expectativas afirman que “si los jóvenes votaran podrían empezar el cambio”. En las últimas elecciones presidenciales de 2018, la opinión pública aseguraba que el potencial electoral joven estaba en la capacidad de elegir presidente por su cuenta, sin embargo, a pesar de que existen cerca de 12 millones de votantes jóvenes en Colombia, la realidad en cifras es otra: según datos del Ministerio del Interior, de cada diez jóvenes seis dicen que no confían en las instituciones democráticas y para 2017, únicamente cuatro de cada diez ejercían su derecho al voto.

La música, el graffiti, el cine y otras artes sirven como denuncia, crítica y reflexión sobre el contexto nacional y local, pero estas formas de participar políticamente de los jóvenes no hacen parte de los resultados electorales o mediciones. Para las investigaciones sociales estas expresiones no son consideradas mecanismos de participación política a pesar de su incidencia en la vida juvenil.

Los jóvenes en Bucaramanga y su área metropolitana, vienen apropiándose de diferentes espacios, a través de estas formas de participación haciéndose sentir como ciudadanos y contribuyendo a la formación de identidad política “la historia ha demostrado que el ahora es el momento justo para participar”. Afirma Juliana Pombo, integrante activa del Centro Latinoamericano del Propósito.

“Los políticos son una mierda; todos son unos corruptos” estas fueron las respuestas que recopiló Luis Ernesto Gómez Londoño, viceministro del Interior entre 2016 y 2018, al preguntar el por qué los jóvenes no confían en la política tradicional, en su campaña #RutaContraLaAbstención realizada en Bogotá en el año 2018. Por su parte en Santander se obtuvieron respuestas como: “la democracia cerrada a las vías tradicionales hace que no surjan verdaderos cambios y nuevas expresiones políticas son relegadas, por eso la política electoral se queda corta” obtenida en la investigación social ‘Incidencia de los contenidos que circulan en redes sociales y mass media en la participación política y electoral de los jóvenes votantes, un estudio desde Santander y Norte de Santander’ de Bohórquez y Rueda, docentes investigadores de comunicación de la Universidad Pontificia Bolivariana.


“La participación política es generar un diálogo desde mi comunidad, hacer una invitación a participar en lo electoral o público, por más mínimo que sea”
Mandala MC, 23 años.

¿Basta, entonces con actos simbólicos y acciones artísticas de protesta? Es la pregunta que surge al hablar de formas políticas que no se encuentran solo en lo electoral, Daniel Corzo, activista, líder de CLAP afirma que en Colombia los jóvenes se están movilizando desde diferentes ámbitos políticos, desde marchas, candidaturas a puestos públicos, arte y proyectos sociales, y todo esto motiva al joven a votar, participar y hacer veeduría ciudadana.

Según el Ministerio del Interior, siete de cada diez jóvenes piensan que a los gobernantes no les interesan sus opiniones y que sus ideas no los representan en lo político, por ello Victoria Fernández, joven trans activista LGTB explica la importancia de tener líderes jóvenes, no solo en lo público sino en la universidad, el barrio y otros espacios, los cuales estén interesados en temas de ciudad y mantengan vigente la discusión política.

“La participación política es algo que debería ser consciente, responsable y colectiva”

María Teresa, Muros con Sentido


“Todo lo que tu haces es participación política... es todo acto que se haga para realizar un cambio, así sea reflexionando sobre ello” comenta Walther Mayger, quien fue líder estudiantil de la Universidad Industrial de Santander para el año 2002  y actualmente es auditor fiscal de la Contraloría General de Santander. Bajo este concepto colectivos como Muros con sentido, LAB 20,  La Panela, Bumaye, CLAP y Colectivo ojo a la calle, hacen uso del arte para apoyar iniciativas sociales y transformar espacios, no solo creando cultura sino despertando el interés de más jóvenes a cambiar, votar y opinar políticamente. Para líderes como Iván Prada los jóvenes están revelando que ellos no solo cumplen con su rol por su edad, sino que son ellos agentes de transformación, presentándose el ser joven como una oportunidad para ser líder y participar, como el mejor momento para ser ciudadanos.